Si quieres leer algo divertido, ligero, romántico, pero sobre todo que te haga visitar por primera (o por décima) vez la ciudad de Roma, recorrer sus calles, plazas y habitar aunque sea solo por un rato en el emblemático barrio de Trastevere, no puedes dejar de leer El primer café de la mañana, de Diego Galdino.
Este libro relata la vida de Massimo vista desde la barra de su negocio, los protagonistas de el día a día son él, sus clientes más fieles y los respectivos cafés que acostumbran tomar.
Una mañana llega hasta su bar la heredera del departamento de la señora Maria, que ha muerto recientemente y quien fue por muchos años vecina y cliente asidua del bar.
Massimo es experto en café, y al mismo tiempo un enamorado y fan número uno de su ciudad natal, en las páginas de este libro, la describe como quien describe a su bella amada.
Es un libro que tiene de todo un poco, tantito para el viajero, para el enamorado, para el que busca algo que le haga reír, pero sobre todo para el que es fan de Roma y de su café.
Roma es bella, ella lo sabe y todos los que hemos tenido el gusto de conocerla también.
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